
Esta semana la editorial regional Ñire Negro Ediciones emitió un comunicado enfocado en la comunidad coyhaiquina y de la Región de Aysén, llamándola a no hacer copias ilegales de los libros infantiles desarrollados por su equipo.
«El inicio de clases, sin duda, que ha acarreado consigo bastantes exigencias a los apoderados en términos económicos, en los gastos de útiles y libros. Estas semanas hemos detectado en la ciudad varios puntos donde están realizando copias de nuestros libros infantiles que han sido incluidos en programas educativos formales, como lectura obligatoria, de algunos establecimientos educacionales de Coyhaique y la región, viéndose afectados por la copia, mayoritariamente, nuestros libros de literatura infantil, y también títulos de autores independientes de la región», comienza aclarando la carta.
«Como editorial, con un proyecto regional sólido y que se mantiene después de una década de trabajo, nos sentimos con la necesidad de dar cuenta de esta situación, porque nos afecta como empresa productora de libros que sostiene una serie de procesos productivos que, quizás el lector no puede visibilizar, esto es: el capital cultural de cada uno de los creadores que han apostado a hacerse parte de Ñire Negro Ediciones con sus obras y toda la cadena de la industria del libro. La reproducción inescrupulosa e ilegal que están realizando de nuestros textos, representa una merma en en los ingresos de nuestro giro, como también un daño económico y moral a los autores de dichas obras», continúan.
«Hacemos un llamado a la comunidad a que cuidemos también este proyecto, la primera editorial regional y coyhaiquina, que abre las puertas hacia un Aysén y Patagonia que se desarrolla de manera saludable en términos culturales. Hacemos un llamado a quienes estén fotocopiando o copiando nuestros libros para que tomen conciencia de que el valor real del libro es mucho mayor y profundo, cuando hablamos de que se merma el trabajo de creadores, escritores, ilustradores, editores, diseñadores, y los procesos de impresión y distribución, más el constante trabajo de difusión y las diversas actividades de promoción.
Invitamos a los establecimientos educacionales a entregar esta información a los apoderados, para que adquieran las obras originales, y también, a que adquieran libros para sus bibliotecas, que estén a disposición de sus estudiantes, considerando que muchas veces no es posible adquirirlos y son de lectura obligatoria. Invitamos a que trabajemos juntos contra la copia y el plagio, con medidas de diálogos en sus establecimientos, charlas o actividades literarias que podamos realizar en conjunto, y que incluyan autores y formatos de fomento lector.
Nos parece fundamental poner en evidencia esta situación, puesto que representa una importante fuga de capitales, se desvaloriza nuestro trabajo, se rompe la cadena de producción necesaria y, en un caso extremo, nos podría hacer quebrar y desaparecer; y, más allá de ser un equipo que trabaja, nos entregamos a nuestro territorio, creemos en Aysén, en las artes, en la literatura, como la vía para dialogar como comunidad, para conocernos, compartir y seguir creando, para visibilizar un desarrollo que también es cultural y de todos y todas, que es necesario y debiera ir en sintonía con un desarrollo económico regional y nacional. Las artes y las letras son el alma y la médula de las comunidades. Así también la oralidad que se rescata y se registra a través de ellas», expresa la editorial.
Asimismo, extendieron una invitación a la comunidad a aprender y valorar el trabajo regional. «Estamos abiertos a que vengan a nuestra librería y conozcan el proceso y la ruta del libro. ¿Cómo lo hacemos? ¿En qué consiste la inversión? ¿Cómo se calcula el precio final? Y, también, que conozcan los esfuerzos que día a día imprimimos en nuestro trabajo para mantener nuestras convicciones sobre lo que significa una editorial en una zona extrema como la nuestra», finaliza diciendo el comunicado.